martes, 22 de febrero de 2011

Capítulo IV - Astrología y Masonería

Capítulo IV

Astrología y Masonería


Se dice que Sagitario rige la evolución humana, pues el Sol estaba en ese signo cuando la Jerarquía inició su Acercamiento, a fin de estimular las formas de vida sobre nuestro planeta. Por lo tanto Sagitario gobernó el periodo de acercamiento subjetivo.

El Sol estaba en Leo cuando tuvo lugar la individualización en el plano físico, como resultado del estímulo aplicado.

El Sol estaba en Géminis cuando este Acercamiento fue consumado y se fundó la Jerarquía en la Tierra. Éste es uno. de los grandes secretos que tipifica el Ritual Masónico, pues el símbolo del signo Géminis originó el concepto de los pilares, tan familiar a los masones. Simbólicamente hablando, podría establecerse que:

Leo rige el grado E .·. A.·.

Géminis rige el grado F .·. C.·.

Sagitario rige el grado del M .·. M .·. hasta el episodio del surgimiento del Maestro, y Capricornio rige la parte final de la ceremonia y la H.·. R.·. A.·.
(16 – 60)

Resulta interesante estudiar los tres signos simbolizados por animales con cuernos. Aries, el carnero con los cuernos vueltos hacia abajo, significa la venida a la manifestación, el ciclo involutivo y de experiencia en la Cruz Cardinal, cuando expresa la voluntad de Dios de manifestarse. Tauro, los cuernos del toro vueltos hacia arriba, sobre un círculo, representa el impulso del hombre, el Toro de Dios, hacia la meta de la iluminación y la liberación del alma, y los dos cuernos (dualidad) protegiendo el “ojo de la luz” en el centro del testuz del toro, el “ojo uno” de El Nuevo Testamento, que “llena de luz a todo el cuerpo”. Luego Capricornio, la cabra, relacionado particular y estrechamente a Aries, oculta (como un velo esotérico) el simbolismo del Unicornio, donde los dos cuernos y el ojo único se fusionan, y está representado por el largo y derecho cuerno del Unicornio en el centro del testuz.

Detrás de todo esto se halla el misterio dual de Leo, porque Leo -en lo que a la humanidad concierne- es la clave o el indicio de todo el zodíaco, y esta constelación encierra dos grandes misterios:

1.         El misterio de la Esfinge, conectado con la relación que existe entre Leo y Virgo, y ligado al secreto de los Ángeles Solares. No es el misterio del alma y la forma, sino el de la mente inferior y la superior y su mutua relación.

2.         El misterio del León y el Unicornio. Una antigua canción de cuna encierra este secreto, y se refiere a que “el León y el Unicornio fueron a la Ciudad”, y esto contiene peculiarmente el secreto de la iniciación y de la ascensión del ser humano hasta el portal donde se lo admite que entre en la Jerarquía, y también la “elevación mística” para lo cual la Masonería posee la clave. Esto tiene que ver con el surgimiento de la conciencia del iniciado (nueva y centralizada) y la derrota del rey de los animales (la personalidad) lo cual conduce a que la conciencia grupal y mundial, el altruismo y la iluminación, triunfen sobre la autoconciencia y el egoísmo. La verdadera versión de este antiguo mito, dice que el rey de los animales es cegado y muerto, porque el cuerpo del Unicornio le atravesó el ojo y el corazón.

El símbolo de este signo es intencionalmente indescifrable. A veces se lo llama la “Signatura de Dios” y no trataré de interpretarlo, en parte porque nunca ha sido trazado correctamente, y por otra porque su delineamiento correcto y la capacidad del iniciado para descifrarlo produce una afluencia de fuerza que no sería deseable, excepto después de la debida preparación y comprensión. Es mucho más potente que el pentágono, y deja al iniciado “sin protección”.
(16 - 124 / 125)


Llamaré la atención sobre el hecho de que, por medio de Urano, Aries se relaciona con Acuario. En los nebulosos comienzos de Aries, el tenue surgimiento de las ideas latentes personificadas -después del girar de la rueda en dos direcciones- ha traído la liberación en Capricornio y también al servidor del mundo en Acuario, que voluntariamente permanece sobre la gran rueda (empleando la Cruz Cardinal como signo condicionante), quedando así dentro de su esfera de influencia a fin de ayudar a la humanidad a liberarse de la Cruz Fija.

En la trayectoria zodiacal hay cuatro signos y son: nacimiento, iniciación y renovada realización cíclica:

1.         Aries, es el “lugar del nacimiento de las Ideas divinas”, aunque estas ideas sean almas traídas a la encarnación y controladas por Marte -hasta llegar al punto de reorientación y ser sensibles a la influencia de Mercurio-, o el nacimiento de las ideas de Dios en forma de planes jerárquicos, a los cuales llega a ser sensible el iniciado.

2.         Cáncer, es el “lugar del nacimiento a la vida de la forma”, la puerta para entrar en la encarnación física. Es el signo en que nace la humanidad como una unidad totalmente integrada, el lugar en que surge el cuarto reino de la naturaleza. La humanidad ha “surgido de la roca y del agua y trae con ella su morada” (como lo expresa El Antiguo Comentario) y la conciencia instintiva masiva viene a la existencia. Observen esta frase.

3.         Leo, es el “lugar del nacimiento del individuo”, el advenimiento a la forma del hombre autoconsciente individual, surgiendo de la masa y del rebaño en Cáncer, siendo sustituidos por la conciencia instintiva y la autoconciencia y por un sentido de responsabilidad de índole individual.

4.         Capricornio, es el “lugar del nacimiento del Cristo”; el lugar del “segundo nacimiento” y el escenario para el surgimiento del quinto reino de la naturaleza, en el momento adecuado. En este signo el iniciado obtiene una percepción espiritual, que más tarde se manifiesta en Acuario y en Piscis como el hombre, el trabajador mundial, y el hombre, como el salvador mundial -ambos con una misión universal.

Insinuaciones como éstas ayudarán al astrólogo del futuro a determinar el tipo de horóscopo que deberá confeccionarse. Surgirán dos preguntas, las cuales requerirán respuestas razonadas:

1.         El sujeto ¿ es una personalidad que progresa dando vueltas y vueltas alrededor de la rueda, perfeccionando la conciencia del yo, desarrollando una plena personalidad por medio de la experiencia y la actuación de la Ley del Karma, sujeto a la Gran Ilusión, y llegando oportunamente a la cumbre de la ambición personal en Capricornio?

2.         ¿esa persona comienza a manifestarse como alma, proyectando luz a través de la densa niebla de la ilusión y preparándose para pruebas mayores en Escorpio, a las cuales les seguirá la iniciación en Capricornio?

Preguntas subsidiarias serían por ejemplo: ¿Para qué muerte se está preparando el hombre? ¿Se aproxima a una inminente crisis que indicaría un nacimiento en algún nuevo estado de conciencia? Sin embargo, la pregunta crucial a ser determinada en cada caso es ¿en qué dirección progresa el hombre alrededor de la rueda de la vida? El horóscopo ortodoxo concierne a la vida de la personalidad, y la forma está atada a “la rueda de la vida cuando gira de derecha a izquierda” (de Aries a Tauro vía Piscis), pero el alma está atada a la rueda a medida que gira de izquierda a derecha de Aries a Piscis vía Tauro. Este movimiento antagónico de la rueda constituye el “girar sobre sí mismo (según lo expresa La Biblia), y conduce al conflicto que se libra en la vida individual de la humanidad y la vida del planeta. En las primeras etapas de la evolución y en la Cruz Mutable, la conciencia está totalmente identificada con la vida de la forma y con la vida de la autoconciencia, autoconservación y autoenriquecimiento. Viene entonces un intervalo en que esta conciencia empieza a trasformarse en conciencia de grupo, identificándose con el alma y su propósito. La experiencia de la Cruz Fija abarca este período. Pudiera señalarse aquí que las experiencias de las tres Cruces tienen un significado masónico y tendrían vinculación con la Logia Azul:
           
a.         La Cruz Común           El grado E .·. A.·.
b.         La Cruz Fija                El grado F .·. C.·.
c.         La Cruz Cardinal         El grado M .·. M .·.

Mucho saldrá a la luz sobre la masonería cuando sus implicaciones astrológicas sean estudiadas y comprendidas. Mucho también será revelado acerca de la vida y del
propósito individuales cuando el destino de ciertos planetas (en los distintos signos del zodíaco) sean correctamente investigados y captados, e interpretados sus significaciones simbólicas. Por ejemplo, es bien conocido, teórica y matemáticamente que:

1.         El Sol está exaltado en Aries. El Sol representa aquí la vida del espíritu, que se expresa plenamente como resultado del gran proceso evolutivo iniciado en Aries. La vida de Dios, que en este signo es “impelida a la actividad”, llega oportunamente a su consumación. La latencia se convierte en potencia y la media noche se fusiona en el Dios, el Padre, rige.

2.         El poder de Venus disminuye en este signo, el cual es perjudicial para Venus. La razón de ello se debe a que el Sol está exaltado y resplandece en toda su gloria, las otras luminarias menores se desvanecen. Así como la personalidad se pierde de vista en la luz del alma, el Ángel solar, así también desaparece el alma y su poder de radiación cuando la Presencia, que hasta ahora se ha ocultado, aparece y domina la escena al finalizar el gran ciclo mundial. Se dice que las mentes encarnantes, seres humanos, y los Ángeles solares, vinieron originalmente de Venus, y a su vez ceden su lugar a la Mónada, el UNO. La mente da lugar a la intuición y la razón a la percepción pura.

3.         Saturno “cae” en Aries. Esto tiene dos significados, porque es un signo dual. Primero: Saturno es el Señor del Karma, el que impone la retribución y demanda el pago de todas las deudas, por lo tanto, nos condena a la lucha por la existencia, tanto desde el aspecto forma como desde el aspecto alma. Por eso Saturno cayó cuando el hombre vino a la procreación. Saturno “siguió a los hijos de los hombres hasta el lugar inferior que ellos ocupaban”. Segundo: el poder de Saturno termina totalmente y su trabajo queda realizado cuando el hombre (el hombre espiritual) se ha liberado del karma o del poder de las dos cruces, la Común y la Fija. Esotéricamente Saturno no puede seguir al hombre hasta la Cruz Cardinal.
(16 - 87 / 89)

En la rueda revertida se agota la influencia saturnina en Capricornio y el hombre se libera del karma y no es necesario que se le ofrezca una oportunidad, porque es un iniciado liberado, un verdadero Maestro Masón, que puede dedicarse al servicio mundial sin ser impedido o detenido por los pensamientos del yo o deseos egoístas. Entonces queda bajo la influencia de Urano, el misterioso y oculto planeta. Su voluntad está enfocada y desarrollada por las influencias uranianas, conviniéndose en un líder. Efectúa los cambios deseados y produce esas nuevas condiciones que ayudarán al alma de la humanidad a expresarse más libremente. Siendo el agua el símbolo de la sustancia y de la expresión material, además de una motivación emocional, Acuario tiene en consecuencia una actividad dual, y el tercer rayo se expresa poderosamente a través de este signo, llegando a nuestro planeta a través de Urano y la Luna, que en este caso oculta o vela simbólicamente a Urano. Por lo tanto, tenemos la doble influencia que ejerce Urano, expresando la cualidad y trayendo las energías del séptimo rayo en un caso, y las del tercer rayo en otro. En último análisis, el séptimo rayo es la energía diferenciada y enfocada del primer rayo, cuando expresa la voluntad del primer aspecto de la divinidad en la Tierra, por medio del poder de relacionar y traer a la manifestación objetiva -por un acto de la voluntad- el espíritu y la materia. Esto lo efectúa mediante la actividad del tercer rayo, expresándose a través de la humanidad y sus unidades individuales, aunque se combina con la energía de los tres rayos liberados por medio de los planetas regentes:

1.         Urano-Séptimo Rayo-La voluntad de ser y de conocer simultáneamente en todos los planos de manifestación.

2.         Júpiter-Segundo Rayo-La fusión del corazón y la mente, propósito subjetivo de la manifestación. Esto se lleva a cabo en la rueda exotérica, mediante la actividad del tercero y séptimo rayos.

3.         La Luna-Cuarto Rayo-La voluntad de ser y conocer, más la fusión del corazón y la mente, resultado del trabajo realizado en la cuarta Jerarquía Creadora bajo la influencia de la energía que produce armonía por medio del conflicto.
(16 – 113)

En cada una de las Cruces de los Cielos hay un signo y una influencia que, en determinado ciclo mundial, predomina en las otras tres. Estos efectos predominantes cambian necesariamente cuando cambia un ciclo mundial; pero, en el ciclo actual, Géminis constituye la principal influencia en la cuádruple influencia de la Cruz Mutable. El principal objetivo de estas cuatro energías consiste en producir esos constantes flujos y periódicos cambios, en tiempo y espacio, que proporcionarán un adecuado campo de experiencia para el desenvolvimiento de la vida y la conciencia crísticas. Esto es aplicable -cósmicamente hablando y también desde el punto de vista de un sistema solar- a un planeta y a un ser humano. El campo de desarrollo para los tres reinos inferiores depende de la condición y del poder de distribuir energía que posee la humanidad. Por lo tanto, podríamos considerar, respecto a la Cruz Mutable, los siguientes hechos:

Géminis. - Fuerza que produce los cambios necesarios para la evolución de la conciencia crística en un punto determinado en tiempo y espacio, siempre compatible con la necesidad.

Virgo. - Fuerza nutritiva que se halla en la sustancia misma, sujeta a los nueve cambios cíclicos del período de gestación cósmica. Fomenta y protege la embrionaria vida crística que se está preparando para la manifestación o encarnación divina.

Sagitario. - Actividad energética de la fuerza de la vida que se manifiesta en el sexto mes, cuando -esotéricamente hablando- los tres aspectos de la naturaleza forma y los tres aspectos del alma se integran y actúan. Dicha integración hace que el sexto mes de la gestación física humana sea a veces tan crítico.

Piscis. - La expresión de la vida y la activa aparición de la conciencia crística en la forma; es también la energética aparición (simbólicamente hablando) de un Salvador del mundo.

Por lo tanto la Cruz Mutable es peculiarmente un símbolo cristiano, significativamente relacionado con la vida crística y con el desenvolvimiento de un Salvador del mundo, siendo particularmente potente cuando la Gran Rueda gira en dirección opuesta a las agujas del reloj. Este hecho surgirá con mayor claridad, cuando los astrólogos sean capaces de determinar con exactitud el grado de evolución y el estado espiritual del sujeto cuyo horóscopo esté en consideración. La naturaleza amorfa de la influencia de Géminis está notablemente confirmada si se estudia la significación de la Masonería. Esta institución mundial -como anteriormente dije- fue organizada bajo la influencia y el impulso de este signo y está regida por él en forma poco común. La forma, o simbolismo exotérico de la Masonería, ha sido cambiada frecuentemente durante los milenios que ha estado activa. Su actual matiz judío es relativamente moderno y no necesariamente durable; pero su significación y la historia de su desarrollo constituyen la historia de la conciencia crística y la luz interna que debe continuar invariablemente. Los que han entrado a través de los dos pilares de Hércules y en el signo Géminis, los discípulos (Joaquín y Boaz) entraron para quedarse.  (16 - 261 / 262)


Sería de utilidad recordar aquí lo que frecuentemente he dicho, de que la Gran Logia Blanca de Sirio es el prototipo espiritual de la Gran Logia Blanca de la Tierra, de la cual la Masonería moderna es el reflejo distorsionado, así como la personalidad es el reflejo distorsionado del alma. También les recordaré la relación que existe entre Géminis y la Masonería, a la cual me he referido con frecuencia.

Una concienzuda consideración de lo que acabo de expresar servirá para remarcar, en la conciencia, la importancia de la constelación Géminis, y la significación interna de la Cruz Mutable. Todas las constelaciones en esta Cruz marcan puntos de cambio, o son custodios de las energías que producen lo períodos necesarios de reorientación, preparatorios a nuevos desenvolvimientos y actividades. Sería interesante indicar que:

1.         La Cruz Mutable-produce esas condiciones que traerán períodos de cambio en la vida del planeta, de un reino de la naturaleza, o de un ser humano. Mercurio desempeña una parte en esto.

2.         La Cruz Fija-produce, como consecuencia de tales cambios internos, ciertos grandes puntos de crisis, los cuales son inevitables y presentan definidas oportunidades. Saturno produce esto en forma predominante.

3.         La Cruz Cardinal-es responsable de efectuar ciertos grandes puntos de síntesis, como consecuencia del cambio y de la crisis. Júpiter es responsable del enfoque de energías en este punto.
(16 - 264 / 265)

No hay comentarios:

Publicar un comentario